18 de febrero del 2010
Por Ramón Cabral
Rocainformativa.com
Distrito Nacional, R. D.- La Confederación Autónoma Sindical Clasista (CASC), planteó en el día de hoy la necesidad de que en nuestra nación se produzca una real y sincera unidad nacional de todos los sectores de la vida nacional, llámese gobierno, empresarios, partidos políticos, iglesias, centrales sindicales, etc, para que de una vez y por todas le busquemos una salida definitiva al problema energético que con tanto brío nos ataca.
“Nuestra confederación es del parecer que los apagones se han constituido en uno de los problemas principales de nuestra sociedad, porque lo cierto es que además de impactar y afectar directamente a todos los hogares, es un asunto delicado por tener muchas consecuencias e implicaciones negativas, sobre todo, para la economía, para el comercio, para la educación, para la salud, etc., por lo que consideramos que sólo con un acuerdo nacional, sólo con un compromiso nacional de todos los sectores sensatos de la vida nacional, podría solucionar este enorme problema que ya va para largo”, estimó Gabriel Antonio del Río Doné, secretario general de la entidad sindical.
La CASC, expresa que no se puede hablar de desarrollo sostenible, que no podemos buscar cambios, ni mucho menos hablar de eliminación de la pobreza, de la superación de muchos males y flagelos sociales, de avances, de progreso y de transformaciones sociales y económicas, teniendo que soportar verdaderas tandas de tediosos apagones que no hacen más que afectar la vida normal de una población, que desde hace muchos años ha esperado por una solución que nunca termina de llegar.
“Es justo precisar, que la problemática energética ha sido un mal que no sólo ha afectado a los sectores y barrios más empobrecidos y necesitados, como equívocamente creen algunos, sino también a los sectores más pudientes como empresarios, inversionistas nacionales y extranjeros, industriales, exportadores, importadores, comerciantes y todas las demás instituciones en sentido general, por lo que nunca hemos podido entender el porqué hemos tenido que darle tanta larga a un asunto tan vital para la vida, para el funcionamiento y para la existencia de nuestra nación constituida por mujeres y hombres laboriosos que sólo desean vivir en armonía y en paz”, expresó Del Río Doñé.
Por último, la CASC considera que nos resulta muy cuesta arriba poder cuantificar los millones que se han invertido en plantas, combustibles, inversores, baterías, paneles solares, energía eólica, millones que debieron ser usados para aumentar el número de empresa, la producción nacional, las oportunidades, las exportaciones, las inversiones privadas y públicas, el mejoramiento de la calidad de vida, el desarrollo económico y la eliminación de la pobreza extrema, en la educación, formación y profesionalización de nuestros ciudadanos (as), en el medio ambiente y en el embellecimiento de nuestras comunidades.