Leonel Fernández sale del poder en el año 2000, y después de pretender meterlo preso y descalificarlo moralmente, regresó al palacio nacional en el 2004, con unas votaciones en las nubes, de 57%, y en el 2012, éstas fueron de un 53.67%, o sea, ganó la presidencia en dos períodos consecutivos.
Hipólito Mejía, sale prácticamente desahuciado del poder en el año 2004, y ya para el 2012, estuvo al tri de volver a ser presidente de la República, logrando unas votaciones con un envidiable 47%, que en su caso, es algo extraordinario, así lo entienden los analistas políticos.
Lo expuesto anteriormente, fue tal, que se dice: lo reivindicaron políticamente, más que un derrotado, fue un gran ganador; esos resultados lo mantienen activo y delantero en la fila del PRD, según las últimas encuestas.
Los planteamientos que nos han servido de ejemplos, muestran que los expresidentes al salir del poder en un país presidencialista, entran en un período de cuestionamientos que tienden a bajar su popularidad, pero con la misma velocidad o tiempo que reducen la simpatía, también debemos admitir que la recuperación de ésta ocurre en un plazo relativamente corto.
Por eso, es razonable y juicioso ponderar la importancia capital de un expresidente cuando termina su gestión bien valorada, ya que si los que han salido mal y muy mal; los casos de Joaquín Balaguer (1978) y de Hipólito Mejía (2004), y después, en pocos años, recuperan su popularidad significativamente, inclusive hasta volviendo al poder.
Por lo tanto, si Leonel Fernández salió con una valoración de 70%, datos que fueron certificados por las firmas encuestadoras locales e internacionales de más prestigio en el país, no hay por qué dudar ni sorprenderse que el repunte del León vuelva a sus posicionamientos tradicionales, apalancado con la excelente gestión de gobierno que ejecuta Danilo Medina.
Señores, ésto va a ser igualito que cuando el hoy presidente de la República, se apalancó con la buena gestión de gobierno y excelente percepción que se tenía del apoyo decisivo y diferencial que aportaba Leonel Fernández.
Finalmente, todo lo expuesto nos lleva a una conclusión; con la simpatía del presente gobierno y en consecuencia del PLD, si Leonel Fernández presenta un equipo de campaña novedoso, gana las elecciones del 2016.
Santo Domingo Este, Rep. Dom.-
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