Doctor Leonel Fernández Reyna, expresidente constitucional de la República en tres mandatos, presidente del PLD y uno de sus dos líderes fundamentales, usted es el hombre que ha cosechado el liderazgo más sólido y duradero del maestro, líder y guía espiritual del peledeismo, representado en la magna figura política de América Latina y más allá; Juan Bosch.
En su hombro, junto a otros distinguidos y destacados miembros y dirigentes del PLD, está la encomienda en su paso por este liderazgo transitorio del partido, alcanzar dos objetivos fundamentales: el fortalecimiento institucional y el mantenernos en el poder político del Estado.
Cuando las bases de este partido decidieron confiar en usted, muy seguras de su talento, ya que no amerita discusión lo que usted bien sabe, que aunque se merecía tal valoración, también es muy cierto que no era el único ni el más merecedor. Entonces, ahí existe una base política, los ignorados, que son el sostén y que tal vez, por ser bases, se ven menos, pero en este asomo de crisis irracional, están muy observadoras y en el momento indicado van a tomar la decisión histórico de juzgar a cada cual como se lo merece, no por el poder ni las lisonjas de los envilecedores decretos y/o ascensos de los cancerígenos listados de grupos.
Ahora, vamos con el señor presidente de la República, el que era llamado el representante más original de las bases antes de ser presidente, y al que muy bien ganado, le decíamos el merecedor como el que más, y existían compañeros que eran tan merecedores como el licenciado Danilo Medina, para cualquier distinción o escogencia, pero más que él, nos parecía un imposible a casi todos.
Y su partido, el de Juan Bosch, y el de sus dueños originales y herederos naturales, las bases y sus dirigentes de firmeza y comprometidos, también les han dado la distinción de estar entre los dos primeros hombres que cosechan los liderazgos más fuertes y duraderos del insustituible Profesor, nuestro Maestro, el líder, Don Juan Bosch.
Muestra de ello, es que por su dedicación, compromiso, lealtad y por todo lo demás, también estas bases y dirigentes del PLD lo han distinguido, qué más prueba que su escogencia como candidato presidencial en el año 2000, acaso no nos las jugamos con usted, y existían otras opciones, donde posiblemente estaban en mejor momento, no con más talento, pero por mucho, más fácil de mercadear, y por qué no, de quedarnos en el poder, pero Danilo, era y es nuestra confianza de unidad, acaso no sabemos de su defensa pública al boschimo.
Inclusive, ayer (año 2012), en las elecciones pasadas, su escogencia no fue por popularidad a lo externo ni lo interno, fue por sus cualidades, por la confianza bien ganada, sabíamos todos los peledeístas que no nos iba a fallar, por lo tanto, ahora, junto al otro líder, no nos fallen.
Ustedes dos, ambos hombres talentosos, convertidos en el dúo más sólido que haya existido en nuestra historia política; cuando hablamos de experiencia de Estado, militancia y formación, se van a negar ante la historia, frente a Juan Bosch y las bases del partido, podrían ganar uno que otro escenario, pero oigan esto, es de corto plazo, y el partido, sus estructuras, no es verdad que les van a perdonar tal actitud, divisionista por demás, desacertada hasta los tuétanos.
No es cuestión del uno y el otro, acaso van a fallarles al Partido, al profesor Juan Bosch y al País, si lo hacen, las bases de esta organización más tarde que temprano se lo van a exigir, a corregir y cobrar; podrán tener muchos amigos y bien encumbrados, pero van a perder lo que siempre han confiado y se las juegan por ustedes, desde cuando formaban parte de los hijos de machepa, realmente razónenlo, ustedes conocen la fuente, tomen de ella.
Su compromiso es con la historia y el mejor futuro del país, con los Padres de la Patria, los restauradores, los independentistas, con Manolo Tavárez Justo, Francisco Alberto Caamaño Deñó,… y con su mentor, el ético y visionario de la sociedad y la política: Juan Bosch.
Leonel y Danilo, Danilo Medina y Leonel Fernández, van a fallarle a la nación dominicana a mitad del camino, hay dos opciones: o la unidad o la disminución, ustedes escojan lo que les enseñó Juan Bosch.
Nunca olviden que la confianza y el liderazgo del PLD están puestos en sus manos para esta coyuntura histórica, hasta el 2020, y al ser un préstamo, lo mejor es que queden bien. Si nos fallan, en las bases del partido los vamos a juzgar, y nos cobraremos lo que les hemos dado: TODO.