Las Águilas Cibaeñas (10-2) tienen casi en sus bolsillos un boleto asegurado para la final, considerando los enfrentamientos pendientes entre los tres equipos enfrascados en la lucha por el otro cupo para la Gran Final.
Al máximo de triunfos que podría aspirar Licey (5-7) es 11, en caso de ganar los seis partidos pendientes por efectuar. Los Gigantes (4-7) alcanzarían 11 triunfos ganando sus siete encuentros por jugar y los Leones (5-8) como máximo llegarían a 10, asegurando los cibaeños un empate con los escarlatas. Los aguiluchos pueden ir armando su muñeco con miras a la final del torneo.
Desde que el round robin se amplió a 18 encuentros en el 1989-90, ningún equipo ha avanzado a la final con menos de nueve triunfos en una semifinal. Este año podría darse un hecho sin precedentes, tomando en cuenta el pobre record de los tres equipos que luchan a muerte por el segundo puesto. Solo tres veces ha alcanzado la final un equipo con nueve victorias, el último las Águilas del 2000-01. Las Tres veces (Escogido 89-90), Azucareros-Toros (94-95) y las Águilas han sido campeones del torneo.
Volviendo al presente, los Tigres ocupan la segunda plaza del round robin con 0.5 juegos sobre Gigantes y Leones. Hace un par de días una victoria de Licey contra Gigantes y un triunfo de Águilas sobre Leones prácticamente hubiera definido la tabla de posiciones, sin embargo ha complicado más la cosa.
Licey ha sido un equipo de rachas. Cuando ganaron sus dos primeros juegos medio mundo comenzó a buscarle pareja a los azules para el baile final. Todo se complicó al perder cinco juegos al hilo. Ganaron tres en línea, para ser blanqueados en los últimos dos enfrentamientos. Los azules tienen pendiente tres encuentros con los Gigantes, dos con los Leones y uno con las Águilas. Los tres, no solo Licey, tendrán que ganar a sangre y fuego su pase a la final.
Los Gigantes estarán dos días corridos en el Quisqueya Juan Marichal, lugar que ha sido su segunda casa esta temporada. Tuvieron 7-3 en la regular y han ganado sus tres compromisos visitando a los capitaleños en esta semifinal. El problema de los Potros es que no ganan en Macorís (1-6), no han ganado dos juegos en línea y le restan tres con las Águilas, conjunto que estará clasificado previo a los tres enfrentamientos. Le quedan los tres juegos contra las Águilas, tres frente a Licey y uno ante los Leones.
Los Leones estuvieron al borde del abismo, mas los Duros de Matar han demostrado que hay que darles el tiro de gracia para eliminarlos. Hace dos días estaban en solitario en el último puesto, ganando a domicilio a los dos equipos del cibao y cortando en nueve la racha de triunfos de Águilas. Les restan dos juegos ante Licey, dos frente a Águilas y mañana frente a Gigantes.
Es sumamente interesante y complicada la situación de Tigres, Gigantes y Leones. Quisiera uno tener una bola de cristal para ver como se define este asunto que nos pondrá en vilo en los días por venir.