Colón, inició el debate al reflexionar “Si los diputados se roban 140,000 pesos mensuales como un extra de su
Augusto Gómez |
salario para clientelismo político, quiere decir que cada vez que éste hace una obra social es con mi dinero y por lo tanto el mérito también es mío.”
Las reacciones a favor y en contra de los cibernautas no se hicieron esperar. Una andanada de imputaciones contra los legisladores fueron lanzadas de manera encarnizada, quedando en minoría los defensores de los congresistas.
Para Fortune Modeste Valerio, el uso clientelista del barrilito es “Un robo descarado en nuestras propias narices.” “Yo reitero: es un robo vulgar en nuestras propias narices y con nuestros recursos. Disfrazando sus politiquerías baratas y rastreras para mantener y conseguir votos. Que lo hagan con sus sueldos. Ma' gueno e' así.”, dijo Fortune Modeste en el acalorado debate.
De su lado, el también dirigente del PLD, Augusto Gómez Rivas expresó su desacuerdo con la acusación de
Santiago Mata |
robo contra los parlamentarios, porque entiende que … “robo es un hecho punible por el que una persona, con ánimo de lucro, toma cosas ajenas utilizando fuerza en las cosas o violencia e intimidación en las personas”, por lo que preguntó a Jacobo Colón, ¿usan los diputados "fuerza o intimidación? "
Augusto Gómez, justifica el uso que dan los congresistas al denominado barrilito, argumentando que “son muchas las instituciones que tienen en su catálogo de cuentas la cuenta "·Ayudas y donaciones " o " Fondo de Compensación Social.". También tienen "Programa de Asistencia Social", cuyos montos son aprobados a través de la Ley de ingreso de gasto público de cada año”.
Pero raudo, Jacobo le respondió “Eso es, un maquillaje, lo peor es que personas como Augusto Gómez Rivas apoye esa vagabundería disfrazada de ayuda social, esa no es su función, y el que quiera hacerlo que lo haga con sus propios recursos, no con los míos, además si eso está reglamentado es violatoria a la constitución que prohíbe los privilegios, y al darle a un diputado esa friolera de 140,000 y a otros posibles candidatos NADA, se crea un privilegio a su favor que los hace continuar en sus respectivas posiciones eternamente.
Para Fernando Buitrago, el que esté libre de
pecado debe de tirar la primera piedra. Asegura que ningún legislador pide que
le den dinero, ya que el dinero lo da el congreso porque así funciona hoy la
sociedad. “Pero de ahí a declarar que son LADRONES, creo que es de muy
mal gusto. Ellos escogieron ser legisladores, pero no escogieron recibir
lo que reciben.
Si
la sociedad está mal pues que se revise la sociedad, llaman a una constituyente
en la que todos esos privilegios los quiten, pero llamarles LADRONES.
Ramón Peralta, preguntó, ¿Cómo se llama aquel que hace creer que los recursos que le ponen en la mano como intermediario entre el Estado y su representante salen de su bolsillo”. En tanto que Jacobo Colón, al continuar con sus imputaciones contra los parlamentarios, dijo “Pero si es mi dinero y yo no he autorizado su uso, ¿Como le llamamos? una sustracción fraudulenta sin el consentimiento del propietario, ¿qué es? Si esos ingresos que se auto designan fuera de la ley los "honorables" los utilizan con un destino distinto al establecido, ¿Qué es? De inmediato, Jacobo respondió su propia pregunta, “Malversación, estafa, abuso de confianza, prevaricador y ROBO, son distintas formas de expresar lo mismo dependiendo de las características que envuelven cada acción delictiva.”
Santiago Mata, expresó que “Lo que hace más perverso ese adefesio es que los congresistas utilizan ese dinero a su discreción, a su antojo. Me consta que hay diputados que mes tras mes andan buscando facturas amañadas para justificar los gastos y así poder retirar la próxima partida, lo cual evidencia que se hace mal uso de ese dinero”.